Muñeca de más de 200 años desaparece de tienda; «he tenido pesadillas», dice dueño

El propietario de la muñeca lamentó el hecho que ha generado una diversidad de comentarios y teorías acerca de la desaparición.

Campinas, São Paulo, Brazil.

Como un caso misterioso y enigmático describió el señor Simoni Miranda la desaparición de su muñeca de porcelana, tras hacer el reporte y compartir su preocupación ante lamentable pérdida.

“Entré en pánico cuando sin dejar rastro la muñeca desapareció anoche de mi tienda de antigüedades. Todo estaba en perfecto orden, tal como lo dejé. He tenido pesadillas imaginando miles de escenarios que pudo haber vivido mi bella muñeca. Añoro encontrarla pronto”, declaró el señor Simoni, a través de un comunicado, respecto al incidente que vive, luego de percatarse de que su muñeca no estaba en el sitio que ocupaba.

El hecho que pareciera que forma parte del guión de la película de terror, las cuales se aproximan con la llegada del Halloween, ha causado gran expectación por lo misterioso, por lo que los comentarios no se han hecho esperar.

Lo cierto es que el propietario de la muñeca de porcelana está conmocionado ante la experiencia que ya ha dado de qué hablar, luego de que el afectado lo hizo público.

Con una figura estilizada y portando un tutu, la muñeca es una de las preciadas antigüedades para el señor Simoni, quien ha hecho público el robo con la intención de recuperar su muñeca de porcelana, una antigüedad de más de 200 años.

Las teorías acerca de la desaparición de la muñeca se han multiplicado, aunque en realidad hasta el momento y luego de varios días de la desaparición no hay nada en concreto. Lo único cierto es que el señor Simoni tiene un compromiso muy próximo, en el cual llevaría a su muñeca, de ahí la preocupación por encontrarla lo más pronto posible.

“Desapareció sin dejar rastro en mi tienda de antigüedades. Todo estaba en perfecto orden, tal como lo dejé. He tenido pesadillas imaginando miles de escenarios que pudo haber vivido mi bella muñeca. Añoro encontrarla pronto”, declaró el señor Simoni.

Además el propietario de la muñeca destacó que la última vez que la vio estaba sentada sobre su caja, con la mirada triste, cabizbaja, “es verdad, cada día bailaba menos y sonreía menos, pero pues ya llevaba tiempo así”, declaró Simoni.